Leyendo el artículo del genial Pepe Colubi para Cinemanía, me he dado cuenta de que, además de patria chica, compartimos problema: yo tampoco sé a que me dedico.
Es una especie de duda freudiana. Yo se la carrera universitaria que escogí, incluso a que dediqué tiempo y dinero en un master y podría decir más, incluso sé que áreas de mi profesión domino. Pero nada de eso es lo que quiero contestar cuando me preguntan: "Profesión". Cuando hacen eso, yo noto como dentro de mi burbujea una sola palabra: escritora.
¿Por que no la contesto? porque cuando tienes escritos unos libros tan famosos como los míos, (mordacidad típica Asturiana), es imposible no dar más explicaciones, o peor aun, soportar las caras de: "pobrecita, se le ha ido la pinza".
Es curioso porque me he dado cuenta de que comparto problema con aquellos que no han salido del armario. Soy una cosa, pero no la digo por miedo al que dirán. ¿Coplero verdad? Es que yo tengo alma de copla, siempre la he tenido.
Así, como Clark Kent mantengo secreta mi identidad, de novelista en este caso, mientras finjo ser una corriente contable. ¡Eso si! por ponerme gafas no paso. Nací miope y astigmática pero la ciencia me libro de ello previo pago de su importe y así pretendo quedarme.
Ya que he empezado hablando de cine, aunque fuera de modo tangencial, contaros que se está celebrando el Festival de cine de Gijón, y que siempre es una oportunidad excelente para disfrutar de buen cine en VOS. y ¿por que no? ver gente que normalmente no pasea por nuestras calles salvo en verano.
¿No os habéis fijado que en verano parece que vienen personas que nunca estuvieron aquí?
CHIN PON
Creo que te entiendo, o que te digan que cómo te puedes dedicar o gustar la escritura si también te gustan las matemáticas, la psicología o la informática si no tiene (aparentemente) nada que ver, parece que sólo puedes tener que ser una sola cosa.
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